El nivel de informalidad laboral de Cartagena es el más alto de las 5 principales capitales del país
Realizamos un nuevo análisis con los resultamos más recientes de los indicadores de mercado laboral correspondientes al trimestre móvil septiembre-noviembre de 2022, publicados por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE).
De acuerdo con esta entidad, una persona ocupada se encuentra en condición de informalidad laboral cuando no cotiza salud, ni pensión o cuando no recibe remuneración.
En Colombia, la proporción de ocupados informales en septiembre-noviembre de 2022 fue del 58,2%, lo que representa una reducción respecto al mismo periodo en 2021, cuando la proporción era de 59,1%.
Cartagena por su parte, pasó de 62,8% en septiembre-noviembre de 2021 a 60,1% en el mismo periodo de 2022. Aunque se redujo más que en el país, sigue estando por encima del promedio nacional.
Ahora bien, este porcentaje resulta menor si se compara con el resto de las ciudades de la Región Caribe, que tienen los niveles de informalidad más altos de toda Colombia. Por ejemplo, Valledupar tiene un 69,5% de informalidad, Riohacha un 68,3%, y Santa Marta un 66,5%.
Este es un tema de preocupación no solo en Colombia sino también en toda América Latina porque refleja la baja calidad del empleo que se caracteriza por: inestabilidad laboral, ingresos bajos, no tributación y la no garantía de seguridad social; lo que se convierte en un desencadenante de círculos de pobreza y exclusión social.
Un estudio elaborado por el Banco de la República en 2012 sobre informalidad laboral en las áreas urbanas de Colombia presentó hallazgos que siguen vigentes una década después. En este se estableció que el perfil de los informales se caracteriza por niveles educativos bajos y se desempeñan en establecimientos de menor tamaño comparados con los formales, es clave recordar que en Cartagena, el 89% del tejido empresarial en 2021, eran microempresas.
Las causas generales de la informalidad aún son sujeto de discusión, sin embargo, las regulaciones e intervenciones del Estado pueden jugar a favor o en contra en lo que respecta a este fenómeno, por lo que es importante que desde el nivel nacional y los gobiernos locales sigan trabajando de manera responsable por alcanzar un mercado laboral dinámico con altos niveles de empleo y baja informalidad.