Control y cultura vial: los desafíos de Cartagena frente a la seguridad vial

Fotografía: El Universal
La movilidad en Cartagena va más allá de los tiempos de desplazamiento: está marcada también por la seguridad en las vías y las consecuencias de los accidentes de tránsito en la salud y la vida de las personas. Desde Cartagena Cómo Vamos (CCV) presentamos un nuevo análisis sobre movilidad y accidentalidad vial, un tema clave para comprender los desafíos que enfrenta la ciudad y su impacto en la calidad de vida de los cartageneros.
Accidentes y víctimas en 2024
De acuerdo con el Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte (DATT), entre 2023 y 2024 los atropellos aumentaron un 6%, pasando de 282 a 299. Además, los accidentes de tránsito también aumentaron, un 5%, pasando de 1.254 a 1.318 casos.
Las motos, se consolidan como protagonistas de la accidentalidad: estuvieron involucradas en el 80% de los siniestros registrados en 2024, lo que equivale a más de 1.000 eventos.
Las cifras de Medicina Legal muestran un panorama aún más crítico. Entre enero y julio de 2025 se registraron 97 muertes por siniestros viales en la ciudad, un 31% más que en el mismo lapso de 2024. Con una tasa de mortalidad de 9,6 por cada 100 mil habitantes, Cartagena supera ampliamente a otras capitales del país: Cali (8,6), Medellín (6,1), Barranquilla (5,8) y Bogotá (4,3).
Lo que piensa la ciudadanía
La percepción ciudadana va en la misma dirección de las cifras. De acuerdo con la Encuesta de Percepción Ciudadana 2024, 5 de cada 10 cartageneros están insatisfechos con el cumplimiento de las normas de tránsito y el control de las autoridades. Además, el 45% está insatisfecho con las cebras y el 50% con los puentes peatonales.
Estos hallazgos evidencian que la cultura vial y el control son retos urgentes para Cartagena. Desde Cartagena Cómo Vamos se reitera la importancia de fortalecer la educación vial, garantizar controles efectivos y avanzar en la mejora de la infraestructura.
Reducir la accidentalidad es posible, pero requiere un esfuerzo coordinado entre autoridades y ciudadanía.